martes, 24 de febrero de 2015

“NO OS QUEDÉIS CALLADOS, CRISTO ESTÁ EN LA CALLE” PADRE PATERA

El Padre Patera ofreció una interesante conferencia sobre la necesidad de ser valientes y salir a la calle para manifestar nuestra fe y nuestra condición de cristiano. El religioso recordó algunos pasajes de la vida de San Francisco de Asís, aludiendo a la necesidad de desprendernos de todo aquello que no necesitamos para salir en busca de los perseguidos y alejados.


Se llama Isidoro Macías aunque es conocido en buena parte del mundo como el Padre Patera. Lleva treinta años en la Casa Familiar Virgen de la Palma de los Hermanos Franciscanos de la Cruz Blanca, en Algeciras, atendiendo y ayudando a los que llegan a nuestro país buscando un futuro mejor. Antes había levantado una casa de acogida en Tánger, después de pasar por Cáceres, Venezuela y Costa de Marfil.

“CUANDO LA ESCUCHA SE HACE AMOR”, título de la conferencia que ofreció el pasado 17 de febrero, fue un breve relato lleno de amor para recordarnos que Cristo está en la calle, en cada esquina, en cada pobre, en cada necesitado. “Nos lo está repitiendo constantemente el Papa Francisco” – aseveraba - . “Vosotros que lleváis una hermandad tenéis que saber que Cristo no sólo está en un paso de Semana Santa, sino en todo aquel que requiere compasión, cariño y amor”.  El Hermano Isidoro es ese ejemplo de entrega y sacrificio que basa su acción en la llaneza y sinceridad de sus palabras. Su mensaje fue tan claro y conciso que casi le sobró tiempo. Sólo quería dejar claro que hoy, más que nunca, todos estamos llamados a la evangelización; sacerdotes, obispos, hermandades, matrimonios…todos tenemos que cumplir el compromiso de seguir a Cristo y defender que el cristianismo tiene que ser algo tangible, palpable, algo que remueva nuestro interior y que nos lleve a la calle “con una actitud distinta”.

     Para el Padre Patera, los tiempos pueden cambiar, pero el mensaje sigue siendo el mismo. “Es tal cual viene en el Evangelio”, una lectura que recomienda a todo aquel que le plantea su distanciamiento con la Iglesia. “A veces leemos muchas tonterías, pero ¿cuántas veces leemos el Evangelio?”, expresaba. “Siempre tenemos que estar preparados para las tentaciones y cuando no sepamos qué responder dejémonos guiar por Dios.”
Al final de la charla, el religioso se ofreció para responder a todas las preguntas de los que pudieron acudir a la Parroquia del Corpus Christi.
La próxima conferencia tendrá lugar el próximo martes, 17 de marzo. Lleva por título EL SENTIR COSTALERO ¿AFICIÓN O DEVOCIÓN?, por Martín Gómez.
Por último, adjuntamos la conocida Oración Simple de San Francisco de Asís, a la que aludió el Padre Patera al inicio de su conferencia.

Señor,
hazme un instrumento de tu paz:
allí donde haya odio, que yo ponga el amor,
allí donde haya ofensa, que yo ponga el perdón;
allí donde haya discordia, que yo ponga la unión;
allí donde haya error, que yo ponga la verdad;
allí donde haya duda, que yo ponga la fe;
allí donde haya desesperación, que yo ponga la esperanza;
allí donde haya tinieblas, que yo ponga la luz;
allí donde haya tristeza, que yo ponga alegría.
Señor,
haz que yo busque:
consolar y no ser consolado,
comprender y no ser comprendido,
amar y no ser amado.
Porque:
dando es como se recibe,
olvidándose de sí es como uno se encuentra,
perdonando es como se recibe el perdón,
y muriendo es como se resucita a la Vida.

JOSE MANUEL BARBA LINARES, NUEVO HERMANO MAYOR DE LA FRATERNIDAD MERCEDARIA DE LA VIRGEN DE LA CABEZA

El nuevo Hermano Mayor es miembro de la Policía Nacional y natural de Rota. Acompaña a la Fraternidad Mercedaria desde hace seis años. La Virgen de la Cabeza lleva, desde hace tres años,  la medalla al Mérito Policial con Distintivo Blanco que le otorgaron a José Manuel tras una importante operación policial.


El nuevo hermano mayor de la Fraternidad Mercedaria de la Virgen de la Cabeza de Jerez es roteño. Un hermano afable que nos acompaña desde hace ya más de seis años. Su buen hacer, su talante distendido y su simpatía le han hecho acreedor de este nombramiento, tras la salida de Salvador Gutiérrez Galván. Fue el pasado domingo 1 de febrero, tras la celebración de la Santa Misa, cuando el bueno de José Manuel Barba Linares se comprometió a representar en todos los actos a nuestra Virgen de la Cabeza. En su discurso, el nuevo Hermano Mayor tuvo palabras de agradecimiento para todos los que le habían confiado este encargo y se comprometió a promulgar durante este año, de manera especial, su devoción por la Morenita de Picadueñas.

            En la vecina villa de Rota José Manuel Barba ya había sido Hermano Mayor de la Hermandad de Nuestro Padre Jesús de las Tres Caídas y María Santísima de la Caridad, cargo que desempeñó entre los años 2000 y 2004. Precisamente el nuevo Hermano Mayor quiso regalar a Nuestra Madre la Virgen de la Cabeza un rosario de plata de la Virgen de la Caridad como acto de hermanamiento simbólico entre ambas corporaciones. Además José Manuel es también Presidente de la Asociación Santo Ángel Custodio de Rota (ASACRO). 

Casado y con dos hijos, nuestro nuevo Hermano Mayor asume el cargo con energía y ganas de transmitir a todos su amor por la Reina de Sierra Morena.
Le deseamos toda la suerte y nuestro más sincero abrazo de Fraternidad.


¡! VIVA LA VIRGEN DE LA CABEZA!!

martes, 17 de febrero de 2015

CUANDO LA ESCUCHA SE HACE AMOR CONFERENCIA DEL HERMANO ISIDORO (PADRE PATERA)


Esta tarde el Hermano Isidoro ofrecerá una emotiva charla en la Parroquia del Corpus Christi de Jerez, en Picadueñas, enmarcada dentro del II Ciclo de conferencias TESTIMONIOS DE FE que organiza la Fraternidad Mercedaria de la Virgen de la Cabeza. La charla, que lleva por título CUANDO LA ESCUCHA SE HACE AMOR, será a las 20:00 horas. 

El calificativo de Patera, a veces frío y distante, se convierte en amor y escucha en las palabras de este religioso que decidió un día abrir las puertas de su casa para encarar de frente el problema de los que llegan a nuestro país sin nada. 

El Hermano Isidoro Macías Martin, al que llaman en la actualidad "Padre Patera", tanto en los medios de comunicación como entre toda la gente que lo rodea, es en la actualidad Superior en Algeciras de la Casa Familiar Virgen de la Palma de los Hermanos Franciscanos de La Cruz Blanca, orden Religiosa a la que pertenece. Nació en Minas de San Telmo (Huelva). Junto a Isidoro Lezcano Guerra (Fundador de los HH. FF. De Cruz Blanca) levantaron una casa en Tánger (Marruecos) para acoger y asistir a aquellos ciudadanos españoles que vivían en la época del protectorado y que no tenían recursos. En esta misma ciudad del norte de Marruecos, tomó el hábito de Hermanos Franciscanos de Cruz Blanca de mano del entonces Arzobispo de Tánger, Monseñor D. Carlos Amigo Vallejo. Después de pasar por Cáceres viajó a Venezuela y a Costa de Marfil. Posteriormente se traslada a Algeciras donde lleva ya más de veinte años para fundar la casa de Acogida  Virgen de la Palma, donde atiende las necesidades de aquellos que llegan a España en busca de un futuro mejor. Su conferencia nos introducirá en la importancia de la escucha para llegar a Dios. 

jueves, 12 de febrero de 2015

REUNIÓN DE ROMERÍA

Mañana 13 de febrero a las 19:30 horas en los salones parroquiales (antigua guardería) tendremos "REUNIÓN DE ROMERÍA"
Deben asistir todos los hermanos y toda aquella persona interesada en acompañar a nuestra fraternidad en esta próxima Romería de Nuestra Señora de la Cabeza en Andújar.


UN CORAZÓN ENTREGADO AL SEÑOR

“Dios me llamaba pero no atendía a su mensaje”. El Padre Damiano Tonegutti, religioso de Los Sagrados Corazones, ofrece en una charla sincera y a corazón abierto su visión de la vocación y explica, sin complejos, cómo fue calando la llamada de Dios en lo más profundo de su corazón. Apenas lleva tres años ordenado y repasa su vida con la mirada de quien se siente un instrumento del Señor. Este joven cura, tierno en su expresión y con un gran sentido del humor, ha sabido convertir su mensaje personal en toda una lección de lo que supone la llamada de Dios. Una llamada que nos toca a todos en cualquier momento de nuestras vidas.

Desde muy joven, en su Italia natal, Damiano buscaba en su interior. Sabía que tenía que ofrecer algo al mundo. Un desvelo personal que le llevó a profundizar en la filosofía, el cine, la cocina, otros países, nuevas culturas. “Leía a todas horas tratando dar sentido a mi vida porque encontré en la filosofía bastantes respuestas a mis dudas”- declaró al comienzo de su intervención.  Para este religioso de Los Sagrados Corazones, el acierto en su camino, como en el de otros muchos, ha sido poder contemplar de cerca el lado oscuro de la vida, con sus obstáculos, sus penas, sus desgracias y miserias. Desde muy joven Damiano tenía esa inquietud afligida. Pero lentamente fueron cayendo en su camino las semillas del Señor. Las que proporcionan esas personas que se nos acercan en momentos muy determinados y que, con sólo una mirada, una sonrisa o un abrazo, te marcan para siempre.
Quizás la mayor duda de Damiano consistía en determinar si ese talante simpático, alegre y divertido de su conducta juvenil podría, en un futuro, ser compatible con la vida sacerdotal. Y ciertamente así lo fue. Porque los que le conocen saben apreciar la cercanía de este joven religioso, su afecto, su ternura, su cálida acogida, su escucha y, sobre todo, su amplia sonrisa.  No fue una adolescencia fácil la de este italiano. Pero aquellas incertidumbres y golpes de la vida quedarán ya en el libro de sus recuerdos como “algo de lo que hay también que aprender. Todos tenemos un pasado. Vale más la pena que entiendas que forma parte de tu vida, y que es mejor quedarte con lo bueno y aprender de los errores para afrontar tu futuro” – explicaba.
De las palabras ofrecidas ayer por este religioso en la Parroquia del Corpus Christi de Jerez se puede desprender que, como ya se ha visto en otras tantas situaciones, la llamada a la vocación es algo que se cuece lentamente, como los pucheros de Santa Teresa. Un ardor que no se apaga y que crece pausadamente, con sus altibajos, desventuras y emociones, pero de una forma regular hacia Jesús. Damiano no tuvo reparo a la hora de desvelar a su compañero inseparable de viaje. Aquel Evangelio pequeño que su madre le introdujo en la maleta cuando, muy joven, decidió salir en busca de aventuras y sensaciones viajando por buena parte del mundo. Y en esa odisea personal de búsqueda de sí mismo, ese anhelo innato que le empujaba a ayudar a los demás, esa indagación y comprensión del dolor de los más desfavorecidos, el bueno de Damiano encontró un pasaje del Evangelio que le marcaría para siempre:
Entonces Pedro le dijo al enfermo cojo: - No tengo ni plata ni oro, pero lo que tengo te lo doy. En el nombre de Jesucristo de Nazareth, ¡Levántate y anda!
Y aquello fue lo que Damiano podría aportar a los demás. “Yo quiero ser portador de Jesús para aliviar también a otros”- pensó. Ahora lo entendía todo. Sin duda, esa era la mayor sabiduría que aquel joven inquieto podría poseer. Porque se había pasado años buscando en la filosofía, el arte y los viajes el verdadero sentido a su vida. Y por fin cayó en la cuenta de que su mayor sentido estaba en la alegría de la Cruz.
Animado por buenas personas y compañeros de comunidades, Damiano refirió en su conferencia que “todos necesitamos a alguien que nos zarandee, alguien que nos salga al encuentro y nos alumbre, alguien que nos lleve a preguntarnos: ¿Qué quiere Dios de mí?”.
En su lucha incansable por buscar a Jesús, Damiano alude a otra cita de quien supuso un claro referente en su vida, Santa Teresa de Calcuta. Esta frase sellaría para siempre su compromiso con Jesús:
El fruto del silencio es la oración. El fruto de la oración es la fe. El fruto de la fe es el amor. El fruto del amor es el servicio. El fruto del servicio es la paz.
De una forma amena y utilizando un precioso símil con su propia trayectoria, el actual párroco de la parroquia de San Pablo en Jerez , quiso emitir parte de una escena de la película El Rey León. Justo el capítulo en que Simba se marcha en soledad cuando entiende que ha perdido su identidad (el fruto del silencio es la oración). Simba necesita a alguien que le zarandee y le ponga las cosas claras(Rafiki, el mono vidente sale en su ayuda). Después Simba reconoce a su padre, Mufasa – rey de la manada - , quien le dice desde el cielo que busque en su interior (el fruto de la oración es la fe).Finalmente y, como el hijo pródigo, Simba reconoce su identidad y regresa a casa renovado y con otra luz en su rostro (El fruto del amor es el servicio y el fruto del servicio es la paz).
Fue el testimonio de fe de un joven religioso que defiende la necesidad de la persona y la importancia de una comunidad para facilitar el acceso a Dios. El testimonio de quien sabe que no podemos borrar nuestro pasado, pero sí darle otro  sentido. El testimonio de un gran sacerdote que entiende que todo lo vivido ha sido diseñado por la mano del Creador.